Toyota invertirá 1,450 millones de dólares en México.
Directivos de Toyota de México informaron al secretario de Economía que el corporativo invertirá mil 450 millones de dólares adicionales en este 2024. Esta cifra se suma a los cerca de 2 mil millones de dólares que Toyota ha invertido en México durante sus 22 años de presencia en el país, según un comunicado emitido por la Secretaría de Economía.
La inversión se destinará a fortalecer las operaciones de la armadora en sus plantas de Baja California y Guanajuato. Luis Lozano, presidente de Toyota México, destacó la importancia de la certeza y estabilidad como pilares fundamentales para que la industria automotriz continúe siendo un motor clave del desarrollo nacional. “Generando más y mejores empleos, desarrollando talento y transitando ordenadamente hacia la electrificación y los nuevos desafíos de movilidad”, afirmó Lozano.
La Secretaría de Economía indicó que esta inversión está enfocada en la producción de la nueva generación de la pick-up Tacoma y la Tacoma híbrida eléctrica (HEV). Además, se estima que la inversión servirá para sostener mil 600 nuevos empleos en el país, lo que representa un impulso significativo para el mercado laboral.
El anuncio fue bien recibido por el gobierno, y el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, comentó que esta decisión refleja “el optimismo y la confianza que genera México a los inversionistas internacionales”. La reunión que dio lugar a este anuncio también contó con la participación de Takaaki Kuga, vicepresidente de Enterprise Strategy México, y Lizette Gracida, directora sénior de Relaciones Externas y Comercio Exterior de Toyota México. Asimismo, estuvo presente Ximena Escobedo, jefa de la unidad de Estrategia y Organización Institucional de la Secretaría de Economía.
La inversión de Toyota se enmarca en un contexto donde la industria automotriz enfrenta retos significativos, incluyendo la transición hacia vehículos eléctricos y la necesidad de adaptarse a nuevas normativas ambientales. La empresa ha mostrado un compromiso constante con la innovación y el desarrollo sostenible, lo que se traduce en una mayor competitividad en el mercado global.
Toyota ha sido un actor clave en la economía mexicana, no solo por las inversiones realizadas, sino también por el impacto que ha tenido en la creación de empleos y en la formación de talento local. La armadora ha implementado programas de capacitación y desarrollo profesional, contribuyendo así al crecimiento de la industria automotriz en el país.
La decisión de invertir en la nueva generación de la pick-up Tacoma es un reflejo de la confianza que tiene Toyota en el mercado mexicano y en las capacidades de su fuerza laboral. La pick-up Tacoma ha sido un modelo emblemático para la marca, y su producción en México permitirá a la empresa satisfacer la demanda tanto en el mercado local como en el internacional.
Además, la introducción de la Tacoma híbrida eléctrica (HEV) es un paso importante hacia la electrificación de la flota de vehículos de Toyota, alineándose con las tendencias globales hacia un transporte más sostenible. Esta estrategia no solo beneficiará a la empresa, sino que también contribuirá a los objetivos de reducción de emisiones y sostenibilidad en México.
El gobierno mexicano ha mostrado un interés particular en atraer inversiones en el sector automotriz, reconociendo su papel como motor de la economía. La inversión de Toyota es un ejemplo claro de cómo las políticas públicas pueden generar un entorno favorable para los negocios y atraer capital extranjero.
A medida que la industria automotriz se adapta a los cambios en la demanda y a las nuevas tecnologías, la inversión de Toyota en México se posiciona como una oportunidad para fortalecer la competitividad del país en este sector. La colaboración entre el gobierno y las empresas es fundamental para lograr un desarrollo sostenible y una transición exitosa hacia un futuro más verde.
En conclusión, la inversión de mil 450 millones de dólares de Toyota en México no solo representa un compromiso con el crecimiento de la empresa, sino también una apuesta por el desarrollo económico del país. Con la creación de nuevos empleos y el impulso a la producción de vehículos eléctricos, esta decisión refuerza la posición de México como un hub automotriz en la región y destaca la confianza que los inversionistas internacionales tienen en el potencial del país.
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