Desaparecen dos familiares de madre buscadora; ONU-DH solicita investigar.

La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) ha instado a las autoridades de investigación y búsqueda en el estado de Guanajuato a coordinar esfuerzos para dar con el paradero de Óscar Iván Jiménez Torres y Luz Alejandra Lara Cárdenas, quienes son integrantes del colectivo Proyecto de Búsqueda, el cual está conformado por familiares de personas desaparecidas.

Ambos fueron vistos por última vez el martes 5 de noviembre en Apaseo el Grande, Guanajuato. Óscar Iván, pareja de Luz Alejandra, es hermano de Jesús Abel Jiménez Torres, quien se encuentra desaparecido desde el año 2017. Los dos son hijos de Blanca Patricia Torres, una madre buscadora que ha estado incansablemente en la lucha por encontrar a su hijo.

La ONU-DH México ha hecho un llamado en redes sociales para esclarecer la desaparición de los integrantes del colectivo Proyecto de Búsqueda. En su mensaje, subrayaron la importancia de respetar el derecho de participación de familiares y actores interesados, en conformidad con los principios rectores para la búsqueda de personas establecidos por el Comité contra la Desaparición Forzada.

Además, otras organizaciones civiles como Espacio OSC han expresado su preocupación por la situación de Óscar Iván y Luz Alejandra. Esta organización ha exigido su aparición con vida, así como justicia para todas las víctimas de desapariciones en el país. La desaparición de estos activistas ha puesto de relieve el grave problema de la impunidad y la falta de acción por parte de las autoridades en Guanajuato.

Los grupos que conforman la Glorieta de las y los Desaparecidos en la Ciudad de México también han hecho un llamado urgente al gobierno de Guanajuato, a la Fiscalía General del Estado y a la Comisión Nacional de Búsqueda. Solicitan que se intensifiquen los esfuerzos para localizar a los familiares de Blanca Patricia Torres, quienes siguen sufriendo la angustia de no saber el paradero de sus seres queridos.

El caso de Óscar Iván y Luz Alejandra es una triste representación de la realidad que enfrentan muchas familias en México, donde la desaparición forzada se ha convertido en un fenómeno alarmante. Las cifras de desapariciones en el país son escalofriantes, y la falta de respuestas concretas por parte de las autoridades agrava aún más la situación.

Las organizaciones de derechos humanos han señalado que es imperativo que el gobierno mexicano tome medidas efectivas para abordar esta crisis. La ONU-DH ha instado a las autoridades a garantizar que todas las investigaciones se realicen con el más alto estándar de profesionalismo y respeto a los derechos humanos.

Mientras tanto, la comunidad de madres buscadoras sigue alzando la voz en su búsqueda de justicia y verdad. Cada vez que una nueva desaparición se reporta, se reaviva el dolor y la frustración de quienes ya han vivido esta experiencia. La lucha de estas mujeres es un testimonio de resiliencia y valentía frente a la adversidad.

El caso de Óscar Iván y Luz Alejandra subraya la necesidad de una mayor colaboración entre las autoridades y las organizaciones de la sociedad civil. Es crucial que se escuchen las voces de quienes han estado en la lucha por sus seres queridos, ya que ellos poseen información valiosa que puede ayudar en las investigaciones.

En este contexto, es fundamental que la sociedad civil se mantenga alerta y apoye las iniciativas que buscan visibilizar la problemática de las desapariciones en México. La presión social puede ser un factor determinante para que las autoridades actúen de manera efectiva y responsable ante la crisis de derechos humanos que atraviesa el país.

El compromiso de la comunidad internacional también es esencial en este asunto. La ONU y otras organizaciones han manifestado su disposición a colaborar con México para abordar la situación de los desaparecidos y fortalecer el sistema de justicia. La cooperación entre países puede ser clave para desmantelar las estructuras de impunidad que permiten que las desapariciones continúen.

En resumen, la desaparición de Óscar Iván Jiménez Torres y Luz Alejandra Lara Cárdenas es un llamado a la acción. Las autoridades de Guanajuato deben redoblar esfuerzos para localizar a estos activistas y garantizar que se haga justicia por todas las víctimas de desaparición. La lucha por los derechos humanos en México es una tarea colectiva que requiere el compromiso de todos, desde el gobierno hasta la sociedad civil.

Esperamos que la atención mediática y las voces de organizaciones de derechos humanos logren poner presión sobre las autoridades para que actúen de manera rápida y eficiente. La vida de dos personas está en juego, y su desaparición no puede ser ignorada.

La historia de Óscar Iván y Luz Alejandra es la historia de muchas familias que buscan justicia. No podemos permitir que su lucha se convierta en una más de las tantas que han quedado en el olvido. Es momento de actuar y exigir respuestas.

La esperanza de encontrar a Óscar Iván y Luz Alejandra debe ser un motor que impulse a la sociedad a seguir luchando contra la impunidad y la violencia en México. La búsqueda de verdad y justicia es un derecho no solo de las familias afectadas, sino de toda la sociedad.